‘Las Palmas’, una víctima más de la pandemia de Covid

COMERCIO. El lugar favorito de muchos estudiantes cerró sus puertas junto con el Itson en 2020, ante el avance del Coronavirus en la región

Ana Valera

Navojoa|DMX|2021|10|21

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Si fuiste alumno del Instituto Tecnológico de Sonora (ITSON), en los últimos 10 años, de seguro debes de haber degustado una deliciosa hamburguesa casera, unos molletes calientitos, pellizcadas o nachos acompañados de tu bebida favorita, en este restaurante tan hogareño, 'Las Palmas'.

Para muchos estudiantes, ‘Las Palmas’ significó un lugar para relajarse de las clases más intensas de la carrera, posiblemente de contabilidad, de alguna ingeniería y por qué no, hasta los de psicología de tanto estudiar el comportamiento humano, este lugar era ideal para almorzar, disfrutar con amigos y hasta adelantar tareas. Y sí, también para ponernos al día en planear nuestro fin de semana.

Elvia Camacho, propietaria del lugar, encontró su vocación al convivir y regalar sonrisas a través de su servicio tan ameno, ella, madrugaba de lunes a viernes para compartir su sazón en una larga jornada de 10 horas, ofreciendo sus servicios continuamente desde el 2010, hasta que la pandemia derrumbó toda su inversión.

En el 2019, doña Elvia perdió el sustento diario que mantenía a su familia, contando solo con la pensión que recibe su esposo, por lo que sus finanzas se deterioraron al grado de no poder sostener la inversión necesaria para su negocio.

"Está muy fea está situación porque no nos alcanza con la pensión que recibe mi marido. ‘Las Palmas’ nos ayudaba a tener un ingreso extra con el que podíamos vivir un poco mejor, pero ya no está, la pandemia nos arrebató el negocio al dejar sin clases presenciales a los alumnos", comentó.

De este negocio dependían también empleados que tuvieron que recurrir al trabajo doméstico, dado a que la crisis económica no les dejó otra opción, abandonado así a ‘Las Palmas’ y a Elvia.

La emprendedora no se pierde la esperanza de que el negocio familiar pueda resurgir, solo espera el regreso de las clases presenciales del ITSON, para seguir regalando amor en cada platillo.