Duermes pero no descansas

Duermes pero no descansas

Como cada semana es un gusto en saludarte en este espacio de reflexión. Muchas gracias por los mensajes recibidos en redes sociales.

En esta ocasión el artículo va dirigido a responder varias preguntas de mis pacientes y de personas sobre la dificultad para descansar durante el dormir.

Uno de los fenómenos cada vez más cotidianos, es el bruxismo, que si bien es un fenómeno físico, su raíz casi siempre es psicológica. El bruxismo consiste en apretar la mandíbula sin percatarnos de ello. Pero esto va mucho más allá, mientras duermes también aprietas la mandíbula, esta es una de las razones que pueden estar propiciando aunque tu dormir es profundo y sin despertar durante toda la noche, al levantarte te sientes muy cansado, tal vez no físicamente pero sí mentalmente. La constante es que duermes pero no descansas y no te explicas por qué. Cuando esto se vuelve recurrente puedes identificar que la cabeza al levantarte es lo que sientes más cansado o agotado y en especial la mandíbula.

Apretamos la mandíbula al estar presionados por los pendientes que necesitamos llevar a cabo con fecha límite de tiempo, el estar atrasados y con sobrecarga de trabajo es un factor que hace más recurrente este hábito inconsciente que, poco a poco, se transforma en un estilo de vivir y se vuelve en el ingrediente que acompaña necesariamente toda situación de estrés.

Como ves, el estrés no se trata únicamente de una simple reacción en el cuerpo, se trata de toda una manera de ser afectado por lo que nos sucede, abarcando las dimensiones emocionales y físicas, a las cuales traen como resultado una manera específica de comportarnos, pero lo primordial, es que dicha afectación, va dejando su huella en el cuerpo de maneras muy concretas: contracturas musculares como en la espalda, el cuello, calambres en las piernas, migrañas, colitis nerviosa (padecimiento que su nombre enfatiza el aspecto psicológico del padecimiento). Actualmente se considera al estrés aquello que potencializa o hace más probable que otras enfermedades aparezcan. Todo lo anterior son elementos que nos hacen pasar noches sin descanso.

Si te das cuenta de que tu problema es el bruxismo, el primer paso es acudir a un chequeo médico, en el cual, generalmente recomiendan el uso de guardas. Una guarda es un molde de plástico que el dentista lo hace de manera personalizada de acuerdo a la forma de tus dientes, ayudando a que la mandíbula descanse y que los dientes no se desgasten.

El siguiente paso se trata de manejar esa manera de enfrentar lo que nos sucede. Y esto aplica también para los problemas mencionados con anterioridad que no es bruxismo (contracturas musculares, colitis nerviosa, calambres, etc). El trabajo principal al que necesitamos enfocarnos es a la auto relajación y un cambio en la manera de valorar lo que nos sucede. Si aprendimos a tomar las cosas demasiado a pecho y apretando nuestros músculos, también podemos aprender a enfrentar lo que nos sucede de manera tranquila, pensando claramente y dando los resultados esperados por nosotros y los demás.

Muchas personas se presionan mucho por prácticamente todo lo que hacen.En psicoterapia recibo a muchas personas con estos padecimientos y lo curioso es que, algunas de ellas, son personas que no tienen problemas fuertes: tienen una relación familiar estable, la relación con los hijos es buena y sin conflictos significativos. Sin embargo, lo que les sucede los presiona mucho, se vive una auto exigencia tal, que es inadmisible el cambio. No se necesitan tener los grandes problemas para tener estos padecimientos y dormir mal, ya que a final de cuentas se trata simplemente de una forma de afrontar lo que sucede. Por experiencia personal, les puedo decir que el bruxismo, es algo que puede quedar en el pasado, viviendo y durmiendo con serenidad.

Si deseas contactarte conmigo, puedes hacerlo en la siguiente cuenta de Facebook “Psicólogo Fernando Reyes” y recuerda, siempre busca el bienestar en tu vida. Hasta pronto.

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